Saltar al contenido

APRENDER DE LOS ERRORES y aprender del pasado

    El hombre que ha cometido un error y no lo corrige, comete otro error mayor. No son las malas hierbas las que ahogan la buena semilla, sino la negligencia del campesino. Confucio
    me cuesta mucho aceptar mis errores, porque estoy condicionada de niño a recibir cariño solo por mis aciertos, y no por mi esfuerzo
    Yo no tolero los errores, porque cada vez que me corrigen y me dicen un error pienso que me estan llamando error a mi persona.
    Cuando practicamos judo, que es un deporte defensivo, lo primero que nos enseñan es a caer, relajando el cuerpo y entregarnos con toda confianza a la fuerza de gravedad, y sentir la atracción terrestre como una tierna caricia, entonces el suelo se hará amable y nos recibirá con suavidad. La teoría es que cuando se aprende a caer, automáticamente se aprende a levantarse, dejarse caer significa tomar la fuerza necesaria para volver a la lucha.
    Si le enseñamos judo a nuestros sentimientos, a nuestro ego, a nuestras pasiones, viviremos felices, si nos despojamos del orgullo, del miedo al ridículo, de la obligación de parecer perfectos, no resultará grave caer porque nos levantaremos rápidamente.
    Hay 10 tips importantes para analizar y aprender de nuestros errores y fracasos:
    1- Nuestro cuerpo no siempre tiene la misma predisposición hacia el esfuerzo diario, no somos una máquina, y nuestro “motor” no siempre está en las mismas condiciones. Lo que hoy salió mal, mañana saldrá bien.
    2- No temas al ayer y al mañana, no vivas la vida como un desafío o revancha. El pasado y el futuro están en tu mente, no existen, al presente es lo único real.
    3- Busca las explicaciones que te ayuden a interpretar los errores cometidos. Las cosas no siempre salen redondas, pero si aprendemos de esos errores podremos corregirlos sabiamente. Sólo detectando tus deficiencias puedes empezar a trabajar para subsanarlas en el futuro.
    4- Sé realista al plantear tus objetivos, la sobrevaloración es un error que a menudo cometen la mayoría de las personas, creando falsas expectativas. Conocer tus límites te hará plantear objetivos y metas realizables.
    5- Busca cambios para mejorar, separa los errores en superficiales y profundos, en pasajeros o crónicos, y concéntrate en los profundos y crónicos, porque los otros desaparecerán solos. Analiza si tu modo de vida es el adecuado a tus objetivos. Tal vez algo en el “guión” de tu vida no es correcto.
    6- Siempre piensa en positivo, tomar acción ya es importante, hacer algo que te acerque a tu meta es valioso, debes sentirte satisfecho simplemente por el hecho de poder hacer lo que deseabas, aunque los resultados no te acompañen. La vida es mucho más que el triunfo o el éxito.
    7- La persona que ves en tu espejo es la más confiable del mundo, tú eres lo más importante que tienes en tu vida, confía en ti por sobre todo. La autoestima es una condición indispensable para triunfar, es lo que define esa línea que separa la victoria de la derrota.
    8- Piensa que todo lo que emprendes es como la figura de una moneda en el aire, saldrá tantas veces cara como lo desees, pero si alguna vez sale cruz, no importa, siempre tienes la oportunidad de volver a arrojarla. Monedas hay muchas, pero tú eres único.
    9- No te detengas ante el fracaso, piensa que el éxito te espera a la vuelta de la esquina, analiza los errores, pero sigue adelante, prepárate para la próxima batalla, no le permitas a tu cerebro que te llene de odios y rencores, o que se regodee en tus errores. Tu vida no es una fotografía, vive tu vida como una película de acción, donde tú eres el protagonista.
    10- Aprende a perder, como decía el Rabino Zev ben Itzjhak: “Quien tiene SUERTE de cometer errores, de equivocarse, de fracasar, es porque tiene SUERTE de corregir el rumbo… las cosas no pasan por un porqué, pasan por un para qué”. “Elegir, decidir y crear, es la Bendición más grande que nos dio el Creador, gracias a esto somos libres, y la libertad es un Don maravilloso”.
    aprender a ser feliz con lo que tienes, porque la avaricia rompe el saco y cuando se rompe te quedas sin nada

    Aprende de tus errores

    A ninguna persona le gusta cometer errores, pero cuando los cometes, debes de  aprender de ellos correctamente y darte cuenta que los errores forman parte esencial de la superación personal; no debes de sentirte abrumado por la culpa y el arrepentimiento, y analiza cómo puedes aprender de ellos.
    Seguro que puedes ser demasiado autocrítico, especialmente cuando te das cuenta de que tu comportamiento podría haber sido mejor de lo que ha sido, pero lo verdaderamente importante, es aprender de los errores y que puedes mejorar la próxima vez

    CÓMO APRENDER DE TUS ERRORES

     No te inhibas debido a  tus decisiones pasadas, lo hecho, hecho esta y no se puede cambiar. De aquí en adelante haz las cosas todo lo bien que puedas
    – Cultiva la confianza en tus relaciones, porque es una de las grandes razones para estar en una relación, tanto para darlo como para recibirlo, y huye de las personas poco  fiables.
    – Si realmente quieres perdonar a alguien quien quiera que sea que haces daño,  tienes que ser capaz de sentir su dolor, porque entonces la persona dañada sentirá que tu disculpa es sincera, y que estás arrepentido.
     No te culpes por ser complaciente, ya que tal vez necesitas ser discreto o aceptar ese momento particular.
    – En realidad, debes de mostrarte agradable, no debes de hacer sufrir a los demás, porque si les estás tratando de una manera lamentable, no te sentirás bien contigo mismo.
    – Controla tu ira, porque ésta  puede matar la motivación; es mejor dejar de lado la ira que perder el tiempo y la energía siendo sarcástico o  haciendo daño a las personas.
    – No te rindas en tus proyectos.

    CÓMO HACERLO

    FOMENTA LA DIGNIDAD
    Si has cometido errores que dañan a otras personas, es importante ofrecer una disculpa digna, para restablecer la confianza; si no te disculpas, por vergüenza o falta de voluntad, la persona ofendida tomará represalias contra ti, y si la disculpa es sincera, puede que la otra persona te perdone.
    Es más eficaz pedir disculpas en persona, en vez de a través de un correo electrónico, y una vez que hayas pedido perdón; es erróneo decir varias veces que lo sientes por el mismo error, es mejor pedir disculpas sinceramente una vez y luego seguir adelante.
    NO SEAS UN PERFECCIONISTA

    Si tienes miedo de cometer un error,  pasarías la mayor parte de tu vida sin hacer absolutamente nada;cometer errores, es una parte esencial de cara al futuro. Ante la necesidad de evitar errores a toda costa, surgirá  una barrera psicológica para asumir riesgos.
    NO JUSTIFIQUES ERRORES
    El instinto natural trata de justificar nuestras acciones y cuando se cometen errores, los justificamos por el bien de nuestro ego, pero en ocasiones es mejor decir la verdad, que has sido tú quien ha cometido el error.
    ENTIENDE LOS ERRORES

    Los errores se producen por diversas razones, y para evitar que se repitan, es necesario comprender la razón de fondo; si cometes errores porque estás permanentemente cansado, trate de dormir más, y si estás estresado permanentemente, buscar formas para relajarte y desconectar del estrés.
    EVITA REPETIR ERRORES
    Debes de evitar sentirte culpable de cometer errores, pero al mismo tiempo, debes de aprender de ellos. Si repites los mismos errores, se nota que no están haciendo progresos; a menudo, los errores se deben a malos hábitos. Para evitar cometer los mismos errores, se requiere una cuidadosa consideración y un esfuerzo sostenido para cambiar tu forma de pensar. 
    – See more at: http://lamenteesmaravillosa.com/aprende-de-tus-errores#sthash.jWXTBO8d.dpuf
    Considerar un error como una oportunidad para aprender es inteligente. La historia de la humanidad está llena de fallos que desencadenaron en importantes descubrimientos.
    La historia de la humanidad está llena de equivocaciones afortunadas que nos han llevado más allá de nuestros límites. Desde el error de cálculo que condujo a Colón al continente americano, muchos aciertos humanos han salido de pequeñas y grandes catástrofes. El yogur, hoy presente en la mayoría de neveras, lo descubrió, según la tradición, una caravana de comerciantes búlgaros que trasladaban leche de un poblado a otro y vieron cómo, por efecto del sol, ésta había fermentado. Uno de ellos la probó para ver hasta qué punto se había echado a perder. El sabor le gustó y, con el tiempo, se descubrió que tenía efectos beneficiosos para el estómago. Había nacido un producto que conquistaría el mundo. Moraleja: tenemos mucho que aprender de las llamadas «serendipias», como se denomina a los hallazgos o descubrimientos que se producen por accidente.
    «Vivimos en una sociedad que premia el acierto y penaliza el error. Para nuestro sistema educativo, el error es estéril y vacío»
    «No hay que tener miedo a equivocarse, porque no hay otra manera de aprender. La vida es un constante prueba y error»
    Dos errores modernos
    «Las equivocaciones son los portales del descubrimiento» (James Joyce)
    En 1974, el departamento de desarrollo de productos de 3M se desesperó cuando uno de sus investigadores, Spencer Silver, produjo una goma altamente defectuosa al olvidar un componente en la mezcla. Lo que parecía mala suerte fue aprovechado por otro empleado del departamento, Art Fry, para crear uno de los grandes inventos de la industria de papelería moderna. Fry era un devoto de la iglesia al que siempre se le caían los papelitos con los que marcaba los pasajes de la Biblia. Antes de que la mal lograda partida de adhesivo fuera arrinconada en la fábrica, tomó parte de aquel pegamento débil para fijar los papelitos a las páginas de las sagradas escrituras. Acababa de nacer el Post-it.
    Otro error de índole empresarial que ha sido ampliamente comentado tuvo como protagonista a Steve Jobs, el fundador de Apple. En 1984 contrató a John Sculley para que dirigiera la empresa con mayor eficacia. La mala relación que se instaló entre los dos acabó, debido al apoyo de los accionistas al recién llegado, con la dimisión de Jobs. Sin embargo, gracias a su despido, Steve tuvo tiempo de crear en 1986 la compañía de películas de animación Pixar, que firmó acuerdos con Walt Disney para producir algunas películas de enorme éxito, como Toy story.Pixar terminó en manos de Disney por 7.400 millones de dólares, y Jobs se convirtió en el mayor accionista individual de la misma Disney. Su éxito no pasó inadvertido a Apple, que en plena crisis le devolvió las riendas en 1997 para que reflotara la empresa. Empezaría la edad de oro de la compañía, con éxitos masivos como el iPod, los nuevos iMac o los actuales iPhone.
    Viaje al centro del error
    «Si cerráis la puerta a las equivocaciones, también la verdad se quedará fuera» (Rabindranath Tagore)
    Pese a los ejemplos, el error no goza de buena fama en nuestra sociedad. El escritor y creativo publicitario Gabriel García de Oro aborda en un ensayo de próxima publicación la injustificada fobia a equivocarnos. El autor de La empresa fabulosa plantea que tal vez no sea casualidad que los términos «error» y «terror» se parezcan tanto: «El error nos produce terror. También vergüenza y culpa. Bajamos la mirada y nos reprochamos no haber sido capaces de acertar, de escoger la opción correcta. Desde pequeños hemos vivido en una sociedad que premia el acierto y penaliza el error. Para nuestro sistema educativo, el error es estéril y vacío, no se saca nada de él».
    Nuestro miedo a equivocarnos se traduce a menudo en miedo a decidir. Si no decidimos, no fallamos. Y si no fallamos, no nos podemos hacer reproches ni nos sentiremos culpables. Resultado: parálisis. Al esquivar los errores, además, renunciamos a nuestro maestro, pues como demuestra la biografía de los grandes inventores y empresarios, en las equivocaciones hay una fuente inagotable de sabiduría. La ciencia avanza gracias a la «prueba y error» y lo mismo sucede en cada vida humana. García de Oro lo explica así: «Sin error no se avanza. ¿Quién ha aprendido a ir en bicicleta sin caerse? Es imposible. Por eso las personas mayores que no saben ir en bicicleta es muy difícil que aprendan, porque tienen demasiado miedo a caerse. Y así no hay quien pedalee. Debemos volver a aprender como cuando éramos niños. Crecer es aprender, aprender es equivocarse».
    Dado que, desgraciadamente, el error nos produce un sentimiento de culpa, preferimos que otros escojan por nosotros antes que tomar el riesgo de equivocarnos. Esta actitud nos limita y frena nuestro crecimiento como personas, pues acabamos diluyendo nuestra libertad dentro de un grupo en el que no tengamos que tomar decisiones.
    si pudiese borrar todos los errores de mi pasado, estaria borrando toda la sabiduria de mi presente
    Cada fracaso le enseña al hombre algo que necesitaba aprender.Charles dickens
    El pasado es en donde aprendes una leccion, el futuro es donde aplicas lo que aprendiste
    —————————————————————————————————————————–
    LAS LECCIONES DE JOB
    Con frecuencia, las lecciones espirituales y de recuperación que estamos aprendiendo en el trabajo reflejan las lecciones que estamos aprendiendo en otras áreas de nuestra vida.
    A menudo los sistemas que nos atraen en nuestra vida de trabajo son similares a los sistemas en los que nos encontramos viviendo y amando. Esos son los sistemas que reflejan nuestras cuestiones y que nos ayudan a aprender nuestras lecciones.
    ¿Estamos aprendiendo lentamente a confiar en nosotros mismos en el trabajo? ¿Y que tal en casa? ¿Estamos aprendiendo poco a poco a fijar limites y a tener autoestima, a superar el miedo y a manejar los sentimientos?
    Si analizamos nuestra historia de trabajo, probablemente veremos que es un espejo de nuestros temas, de nuestro crecimiento emocional. Lo más probable es que actualmente también lo sea. En cuanto a hoy, podemos creer que estamos justo donde necesitamos estar, tanto en casa como en el trabajo.
    “Hoy aceptaré mis circunstancias actuales en el trabajo. Reflexionaré acerca de cómo lo que estoy aprendiendo en mi vida se aplica a lo que estoy aprendiendo en el trabajo. Si no lo sé, me someteré a la experiencia hasta que esto se me aclare. Dios mío, ayúdame a aceptar el trabajo que se me ha dado hoy. Ayúdame a estar abierto y a aprender lo que necesito estar aprendiendo. Ayúdame a confiar en que puede ser bueno y será bueno”.
    TROPEZAR NO ES MALO, ENCARIÑARSE CON LA PIEDRA SI
    Si soy capaz de hablar de forma relajada de los fracasos, es porque los he entendido como parte de mi proceso de crecimiento y aprendizaje. Enhorabuena para mi ! me siento segura y se que los errores no dicen nada de mi. Sigo valiendo lo mismo

    error: Content is protected !!